Lecturas

Hace tiempo que pensaba escribir un post del libro que estoy leyendo. Lo compré en la estación la última vez que bajé a casa. Había cogido un libro de casa, pero ya en el trayecto del cercanías lo liquidé. Ufff. Que tostón. Casi que cuando llegue me compro uno.

La verdad es que los quioscos de las estaciones no son mis favoritos para comprar libros. Normalmente o són best-sellers que no me gustan o novelas de superamores románticos que no me gustan nada de nada. A ver que se empiecen a dar cuenta que las mujeres no buscamos un príncipe azul, ni nos morimos si no tenemos un hombre a nuestro lado. Pero... Una urgencia es una urgencia y tal y como está el Sr. RENFE, preveía un viaje muuuuyyyy largo (llegamos con hora y media de retraso. Si es que soy adivina, je, je).

El libro es la biografía póstuma de una persona anónima, Marta Pérez Martín, escrita por ella misma a través de sus cartas, e-mails y diarios personales: Una piedra roja, una piedra azul, una piedra amarilla.

Es un libro muy emocionante, que te hace pensar, reir, llorar... De estos libros que se quedarán contigo para el resto de tu vida. Que te acompañaran siempre.

Se me hace un poquito difícil describirlo, porque son muchas las emociones que transmiten. Pero yo quizás me estoy quedando en estos momentos (esto supongo que depende de la persona que lo lee, el período por el que esté pasando...) con el gran valor de la comunicación, que transmitía en toda su correspondencia. Su deseo de llegar más allá de las personas, las relaciones... La fuerza y la vitalidad que transmite el libro, el optimismo. De momento me he parado en un punto conflictivo: La detección del cáncer. Creo que el final lo aplazaré un poco hasta que reuna un poquito de fuerzas. La verdad es que me cuesta oir, ver o leer todo lo relacionado el tema del cáncer, y sobre todo de los temas de la gente cercana a personas enfermas de cáncer.

Lo recomiendo a todo el mundo. Muy buen libro y una gran persona. Consigue que apures los minutos, disfrutes de todos los momentos regalados. Dejo de hablar del libro porque es muy difícil condensarlo en pocas palabras. Este libro merece otro post en el que me intentaré recrear más.